EL SEMILLERO DE LA VIDA DESDE LA PERSPECTIVA DEL VOLUNTARIADO
Por:P. Paulino Toral
1. ¿Cuál es la misión, motivo, propósito, fin o razón de ser de la existencia del Semillero de la Vida?
Llegar a ser Centro apostólico católico que genere familias en las que el Espíritu de Jesucristo fundamente, anime y oriente las relaciones entre esposos, padres, hijos y hermanos; de tal modo que cada hogar sea capaz de aportar al mundo, lo que él hoy más necesita: cristianos firmes en lo esencial de la doctrina, coherentes con los principios cristianos y humildemente felices en su Fe.
2. ¿Cuál es la visón, el camino al cual se dirige el Semillero a largo plazo para lograr cumplir esa misión?
El Semillero se dirige a contrarrestar la crisis familiar de hoy, tomando como punto de partida la formación de la mujer desde su infancia, de tal modo que, llegado el momento, sea capaz de elegir al varón con el cual formará un hogar verdaderamente cristiano; después de haber vivido un noviazgo y un enamoramiento en íntima y sincera comunión con Jesucristo, en “pareja de tres”.
Intentamos la restauración y apuntalamiento de la familia valiéndonos de la mujer. El camino del Semillero es la mujer, y ella, caminando con Jesús, se encontrará con el varón con el cual dará sus hijos como padre a un “hombre de Dios”.
3. ¿Por qué la mujer?
Porque Dios comenzó la Redención con una Mujer, María, Virgen y Madre, la Redención del pecado que, a través de otra mujer, Eva, el Maligno introdujo en el mundo. La mujer es “sujeto pasivo” de nuestro apostolado, porque ella recibe la formación; y es “sujeto activo”, porque es ella quien elige, decide y forma con buen criterio al que un día será el padre de sus hijos; lo va llevando durante el enamoramiento por los caminos de las virtudes y se casa con él para formar un hogar estable y feliz. Lamentablemente, hoy, la mujer se preparan sólo para su profesión, pero no para su vocación de novia, esposa y madre; por esto hay tanto sufrimiento hogareño. En el Semillero intentamos prepararlas también en su vocación.
4. ¿Y el varón?
Primero: el varón recibe constante orientaciones en la predicación parroquial en los grupos juveniles de la ciudad.
Segundo: nuestro aporte consiste en la reconstrucción de “la familia” a través de la multiplicación de las familias que conformen nuestras chicas con su enamorado. Jesús decía: “Yo soy la puerta; nadie entra sino por mí. El que entra por otro lado es un ladón y salteador”: El chico que se resista a entrar en la vida de la chica por la Puerta, no se merece ninguna confianza. Las chicas del Semillero deben enamorarse a una edad y con un criterio que les capacite para analizar, sondear, discernir, decidir y elegir el padre que darán a sus hijos. Una buena madre, da un buen padre a sus hijos. El varón será parte del Semillero, perteneciendo a EDEN, a través de la invitación que le haga su enamorada. Si una chica tiene enamorado y quiere entrar con su novio a EDEN, primero ella debe hacerse mensajera para recibir la formación adecuada.
Tercero: Habiendo hecho ella la elección de su chico, tenemos 3 Programas que se ponen a disposición de la pareja: Escuela de Enamorados y Novios, de Prepadres y de Padres.
5. ¿Qué sintonía con la doctrina de la Iglesia tiene el Semillero de la Vida?
La Iglesia enseña (FC 66) que el único modo de evitar las crisis familiares, que con abrumadora frecuencia se vienen dando desde hace décadas, se ha de proporcionar a las nuevas generaciones una adecuada preparación para Matrimonio, y que esta preparación, aunque se lleva a cabo en el Curso prematrimonial (antes de la boda), debe empezar en la infancia y la niñez (“preparación remota”); debe darse en la adolescencia y en la juventud (“preparación próxima”) y debe culminar en el enamoramiento y en el noviazgo (“preparación inmediata”); incluso ha de ofrecerse a los jóvenes recién casados un constante mantenimiento.
6. ¿Semillero ocupa el lugar propio de los padres en la formación de sus hijas?
No. La Iglesia enseña que “los padres son los primeros y principales educadores de sus hijos”. Semillero es sólo un complemento de la formación que las hijas deben recibir en el hogar. El Semillero, lejos de suplantar a los padres, intentará ayudarles a tomar conciencia del ineludible papel asignado por Dios en el destino de sus hijas. Por esto, en el Semillero la coordinación con los padres será esencial. La formación, sobre todo de las niñas y adolescentes, será imposible sin la integración de los padres en el Semillero. El éxito del Semillero estará en que los padres lleguen a sentirse parte integrante y protagonistas del apostolado del Semillero.
7. ¿Qué relación tiene el Semillero de la Vida con la Casa de la Vida?
La Casa de la Vida tiene dos “estrategias”: En Urdesa, la estrategia de emergencia, ante las madres que tienen el peligro de acudir al aborto por la situación conflictiva del embarazo (adolescencia, juventud, pobreza, soledad, abandono, enfermedad, rechazo familiar, ilicitud moral de la relación sexual, violación, enfermedad mental). En Santa Teresita, en el Semillero de la Vida, la estrategia preventiva; un programa que abarca todo el camino hacia el matrimonio, comenzando en la infancia.
8. ¿Qué comprende la estrategia preventiva del Semillero de la Vida?
En Semillero, con el paso del tiempo llegarán a funcionar 5 Programas (Por ahora, ya estamos trabajando en los numerales 1, 2 y 5):
1. Mensajeras de la Vida: Todas las chicas que pertenecen al Semillero de la Vida se llaman Mensajeras de la Vida, y están organizadas en 4 niveles:
a. Pastorcitas (4-6 años)
b. Belén (7-12 años);
c. Nazaret (13-16 años)
d. Caná (17 años en adelante).
2. Escuela de Enamorados y Novios (EDEN): Para la Mensajera enamorada y su enamorado.
3. Escuela de Prepadres: Ante los errores que hoy se cometen en la temática de amor fiel de pareja; de procreación y educación de los hijos, cuando una pareja de enamorados de EDEN han decidido en casarse, ahondan especialmente en estos 3 temas básicos: Amor conyugal; procreación; educación de los hijos.
4. Escuela de Padres: Los recién casado continúan su formación y un constante “ABC” en su vocación de esposos y su misión de padres.
5. Guías de la Vida: Es el equipo “volante” del Semillero que da talleres y charlas a la juventud: A los alumnos de los Colegios donde nos permitan hablar sin límite alguno de visión cristiana del amor, las sexualidad; a los grupos juveniles de las parroquias; a las chicas del Semillero y sus padres, con la experiencia que les proporción el trato directo con la juventud, impartir talleres y dar charlas.
En todos y cada uno de estos programas se requiere el compromiso del Voluntariado. Podremos hacer realidad los sueños de Dios y su Madre, sólo si contamos con voluntarios, no sólo de palabra, sino de obras y de verdad. El Semillero irá constituyéndose en sus 5 Programas en la medida que el voluntariado se comprometa y actúe
9. ¿Cuándo funcionará el Semillero de la Vida?
Intentamos inaugurarlo cuando hayamos llevado a cabo la remodelación y la ampliación de la Benedict. Pero estamos ya trabajando con las Mensajeras en locales de la guardería “Gracias María”.
• Las Pastorcitas y las de Belén están viniendo los sábados de mañana para recibir una formación básica. Pero la labor más importante a esta edad está aún por llevarse a cabo; y es con los padres, para que ellos formen a sus niñas en el hogar.
• Las de Nazaret y Caná están ya viniendo también. Cuando el Semillero esté construido, se les ofrecerá la posibilidad de venir todos los días en un horario muy amplio, para estudiar en salas bien montadas.
10. ¿A qué se comprometen quienes quieren formar parte del voluntariado del Semillero?
1. A hacer del Semillero su mayor compromiso apostólico con Dios y la Iglesia. Aunque la idea del Semillero de la Vida, es de un sacerdote, el Semillero es un espacio apostólico fundamenta y eminentemente laical. Sin el compromiso serio del laico, Semillero se quedaría solo en una idea.
2. Primero, tomarse en serio los “4 fundamentos” del voluntariado de la Casa de la Vida:
a. Espiritualidad: vivir una vida cristiana coherente; de práctica religiosa y el intento serio de cultivar las virtudes naturales y sobrenaturales.
b. Formación: Ya que vivimos en un mundo doctrinalmente relativista, en el que prima la opinión sobre la certeza, en el que por influjo del ambiente anticristiano pululan los sofismas, los errores (incluso de buena fe), dado que en el Semillero se debe impartir, no opiniones, sino doctrina segura, al voluntariado se le pide formación profundamente católica.
c. Apostolado: Todo voluntario debe tener un quehacer concreto en el Semillero, en cualquiera de sus Programas
d. Testimonio: En la vida familiar y social, la voluntaria ha de llevar una vida coherente con los valores cristianos y católicos.
3. Segundo, dada la inmensa trascendencia de la labor que le lleva a cabo en el Semillero, al voluntario se le pide asumir su pertenencia al Semillero como una llamada de Dios para servir a la Iglesia. Se le pedirá sintonía con los planteamientos; responsabilidad ante las necesidades espirituales, doctrinales y humanas de este Centro apostólico. En términos muy nuestros, “ponerse la camiseta” por el semillero… y “sudarla”.
11. ¿Qué se le pide al Voluntariado para que funcione el Semillero?
El Semillero necesita del compromiso del Voluntariado. Este compromiso ha de ser verdadero, serio, responsable, sacrificado, perseverante en medio de las dificultades y obstáculos. Por ahora les pedimos que elijan en dónde podrán servir y recibir una capacitación. Esta capacitación garantizará el que todos hablemos el mismo idioma y estemos coordinados en la doctrina. Como toda obra apostólica necesita recursos materiales, el voluntariado ha de ayudar en la búsqueda de fondos.
Necesitamos Personas que puedan formar al Voluntariado: muchos quieren trabajar, porque la idea les atrae, pero piden capacitación.
Necesitamos Voluntarias para dar a las chicas charlas, talleres, cursos, manualidades, hogar…
También con asesoría personal (las chicas hoy tienen graves problemas personales y familiares) La asesoría personal debe estar en plena sintonía con la Iglesia y con lo que los padres de las chicas suponen que sus hijas recibirán en el Semillero.
Necesitamos dar charlas y talleres a los padres sobre cómo formar a sus hijas y cómo responder a los problemas que el mundo les plantea como padres. Deben tener el atractivo suficiente como para que los padres no las vean como una obligación que no hay más remedio que cumplir, sino como una oportunidad para alcanzar la excelencia personal y familiar.
12. ¿Y los padres de las chicas?
A los padres se les invita, además de mejorar su formación como formadores de sus hijas e integrarse como parte del equipo del Semillero, a solidarizarse responsablemente con la economía del centro donde sus hijas están aprendiendo, no inglés, artes marciales o bellas artes, si no el arte de saber vivir como hijas de Dios.